UnivForum 2019

Getting down to Business.
The transformative power of work

¿Alguna vez pensaste que sólo los seres humanos tienen manos?

Puede parecer obvio, pero no lo es. En el mundo de la naturaleza, los seres humanos son particularmente vulnerables. En el mundo animal, sin embargo, las alas, patas o aletas se transportan mucho más rápido y más lejos; el pelo y las plumas protegen contra los elementos y factores ambientales; los sentidos, los instintos y los mecanismos de defensa refinados se activan automáticamente para proteger contra los peligros e identificar las oportunidades de crecimiento.

Pero nuestra vulnerabilidad es también nuestra fuerza

Con nuestras manos, podemos construir alas para volar, podemos diseñar nuestro hábitat y tejer nuestra ropa. Con nuestras manos podemos cuidarnos, construir relaciones y protegernos a nosotros mismos y a los demás.

Con nuestras manos podemos cuidarnos, construir relaciones y protegernos a nosotros mismos y a los demás.

Nuestras principales necesidades se convierten en artes y profesiones: Medicina, Gastronomía, Arquitectura, Ingeniería, Moda, Comunicación, Educación, Trabajo doméstico, Diseño.

Nuestra interdependencia crea oportunidades de trabajo: Salud, Política, Derecho, Economía, Comercio, Asuntos Internacionales. Nuestra apertura a las infinitas posibilidades nos hace progresar: Tecnología, Entretenimiento, Innovación, Investigación, Creatividad.

Trabajamos con nuestras manos. Pero, ¿hemos trabajado siempre de la misma manera?

Hoy podemos decir que el mundo del trabajo está experimentando la transformación más drástica desde la Revolución Industrial del siglo XIX. La tecnología de la información, los cambios en la demografía social y la globalización son algunos de los factores que configuran el futuro del trabajo, en el que la formación y las carreras que van en una dirección se sustituyen por una formación y unas carreras multifacéticas en las que las aptitudes, las capacidades y las actitudes personales, como el pensamiento crítico, la resistencia, la resolución de problemas y la toma de decisiones, se valoran cada vez más más más más allá del conocimiento técnico.

El mundo del trabajo en el siglo XXI está lleno de desafíos: grandes disparidades geográficas y sociales, corrupción, estructuras ineficientes, trabajo forzoso, trabajo no reconocido y no remunerado, trata de personas, nuevas formas de esclavitud, actividades no reguladas en sectores emergentes y altos niveles de desempleo juvenil.

Pero pongámonos a trabajar. El profesional del siglo XXI es serio, dedicado, diligente, creativo, transformador, enfocado, capaz de perseverar en un esfuerzo cognitivo y físico integrado. Pero, ¿qué tipo de desarrollo personal necesita un profesional de la fuerza laboral actual para convertir las necesidades en oportunidades y las vulnerabilidades en fortalezas? ¿Cómo podemos transformar la profesión para que se convierta en un verdadero servicio a la sociedad y a las personas que nos rodean? ¿Qué pueden hacer nuestras manos que un brazo robótico no pueda hacer? ¿Qué podemos dar a la humanidad que esté más allá del alcance de la inteligencia artificial?

Hay muchos desafíos... pero nuestras manos están abiertas a infinitas posibilidades...

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